viernes, 28 de junio de 2013

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Era testigo de Jehová la 
que murió de dengue 

Sus familiares no permitieron la trasfusión de sangre por su religión y murio

Vanessa Cuevas/API
Chilpancingo, Gro. - A seis meses de que una mujer de 23 años falleciera víctima de dengue, el secretario de Salud, Lázaro Mazón Alonso compareció ante la Comisión de Salud del congreso local, para explicar lo que fue denominado como una negligencia medida.

El pasado 01 de enero del presente año la paciente Areli Portillo Alejo, quien enfermó de dengue hemorrágico y murió por esta causa en el hospital del Niño y la Madre, luego de que en el Hospital de Coyuca la enviaron a la capital, debido a que su enfermedad de dengue hemorrágico se complicó por el embarazo de siete meses.
Tras una lucha entre la ética médica y la religión de los familiares evitaron que se le hiciera una transfusión sanguínea a Areli Portillo que le pudo salvar la vida, lo cual fue argumento por el responsable de salud en el estado.
Sin embargo el argumento no fue valido para el diputado perredista, Germán Farías Silvestre, quien meses antes pidiera la comparecencia de Lázaro Mazón por este caso. 
Y es que el legislador cuestionó que en Guerrero existe un número considerable de personas que predominan la religión de testigos de Jehová, por lo que no se debe  dejar en riesgo  a esta población ante la negativa de transfusiones sanguíneas.
Mazón Alonso y Adiel Medina Bello, director del el Hospital del Niño y la Madre comparecieron ante la Comisión de Salud, integrada por los diputados  Verónica Muñoz Parra, Roger Arellano Sotelo, Karen Castrejón Trujillo, Julieta Fernández Márquez y Oscar Díaz Bello, quien no estuvo presente., asimismo estuvieron otros veinte diputados locales que acudieron al encuentro en la sala José Francisco Ruiz Massieu del congreso local.
Tras el motivo de la comparecencia,  el director del el Hospital del Niño y la Madre, Adiel Medina Bello, explico que el pasado 29 de diciembre del 2012 la paciente Areli Portillo fue referida grave del hospital de Coyuca con un diagnóstico de dengue hemorrágico y un embarazo en presentación transversa, con alternaciones sanguíneas derivado el dengue  que ponían en riesgo su vida.
Por lo que fue sometida a una cesárea, considerando que el feto corría riesgos de morir, complicaciones que la llevaron a un estado de gravedad extrema por la epidemia del dengue hemorrágico, durante su estancia presento falla renal, pulmonar, cardiaca, hepática y circulatoria, que finalmente la llevaron a un paro respiratorio al ser intervenida por segunda ocasión el día 01 de enero del 2013.
Medina Bello señaló que parte del tratamiento indicado por los especialistas durante su estancia fueron las transfusiones de litrocitos, plaquetas y plasma, ya que por las creencias religiosas de la paciente, esposa y padre de la misma no fueron aceptados en ningún momento transfusión sanguínea.
Puntualizó que el motivo del fallecimiento de Areli Portillo Alejo fue por falla orgánica múltiple, secundaria al dengue hemorrágico y no por la apatía o negligencia médica.
Por su parte el secretario de Salud, Lázaro Mazón Alonso  afirmó que la paciente manifestó por escrito la negativa a recibir transfusión sanguínea y rechazo que su fallecimiento fuera por negligencia.
Asimismo indicó que derivado el caso se dio parte a la Procuraduría General de Justicia  del Estado (PGJE), por lo que se llamó al Ministerio Publico de delitos sexuales y violencia intrafamiliar, sin embargo la respuesta de esta instancia fue decir que  no podían intervenir, por lo que aconsejaron enviar el caso a Derechos Humanos, pero esta tampoco respondió.
Al respecto los diputados Karen Castrejón, Omar Jalil Flores Majul, Roger Arellano y Alicia Zamora cuestionaron la forma de tratar el dengue en Guerrero y la manera de abatir la problemática de las personas que predominan la religión mencionada. 
El diputado German Farías quien no pertenece a la Comisión de Salud fue quien más cuestiono las alternativas que debe buscar la Ssa para salvar la vida de las personas a pesar de sus creencias religiosas ya que está obligada a dar salud.
Farías Silvestre argumentó que no se trataba de señalar que existiera intolerancia religiosa ya que existe sustitutos de sangre como transportador artificial de oxigeno denominado «tao», el cual  es un compuesto químico capaz de suplir la principal labor de los glóbulos rojos, esto de acuerdo a información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMMS).
A esto, Mazón Alonso respondió que no existe un sustituto de sangre, ya que de ser así no existían los bancos de sangre. Sumado a ello leyó un comunicado emitido por el esposo de la fallecida  Daniel Torres Santana y del Comité de enlace con los hospitales de los testigos de jehová de Chilpancingo, que preside el ministro religioso Juan José Zamora Chávez  en el cual reconoce el trabajo hecho por los médicos que atendieron a su extinta esposa quien murió por dengue hemorrágico, enfatizo que agradecen el que se respeten las creencias religiosas de los testigos de jehová. (Agencia Periodística de Investigación)

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